Permanente en las pestañas

Dicen que es el tratamiento estético de moda en los salones de belleza de Estados Unidos. En unos 40 minutos, puede conseguir unas pestañas de ensueño que duran más o menos ¡9 semanas!.

Esta técnica de ondulamiento transitorio de las pestañas era muy popular en Francia hace unas décadas, pero sólo desde el verano pasado comenzó a ganar adictas en EEUU. La tendencia hace que en algunos de los salones más exclusivos del país los estilistas tengan que hacer unas 10 permanentes al día, con clientas fijas procedentes de varios estados.

Para realizarlo correctamente, se emplea un rulo de pestaña, un pequeño bigudí, de diferente tamaño según la extensión de las pestañas y sobre las mismas se extiende una sustancia hipoalergénica. Una vez seca, se aplica el gel permanente, similar al que se usa para el pelo, pero más ligero y mezclado con colágeno.

Los estilistas consideran que es una técnica que sólo puede ser realizada por profesionales, pues el procedimiento puede ser peligroso y resultar dañado el ojo debido a la sustancia que se emplea, que nunca debe entrar en contacto con el ojo.

Luego, sólo hay que esperar unos 20 minutos, que algunos clientes aprovechan para recibir un tratamiento de reflexología o relajante. Posteriormente se continúa con un producto suavizante para finalmente impregnar con una sustancia proteica que permitirá llegar a unas pestañas sedosas y brillantes.